Un poco tarde
te veo, mariposa,
más no te olvido.
Vienes conmigo
y estás entre mis sueños
y fantasías.
Es algo tierno,
saberte tan cercana,
que lo agradezco.
Pero te veo,
tus alas me acarician
con suavidad.
También me hablan
tus ojos tan azules
y me confunden.
Soy tan feliz
sintiendo tu presencia
que hasta sonrío.
Y mi sonrisa
se funde y se confunde
con tu hermosura.
Hay mucha magia
que dejas con tu esencia
sin darte cuenta.
Pero se alegran
los ojos del que escribe,
por ti, estos versos.
Rafael Sánchez Ortega ©
27/02/21
Unos versos para ti, mariposas querida, que tantos sueños dejas en el alma del poeta con tu vuelo y con tu magia.
Muy bonito. Saludos
ResponderEliminarGracias Frases Bonitas.
EliminarSaludos.
Es verdad...cuantas veces nos inspiramos en ellas..y bien vale dejarles unos versos tan tiernos para agazajarlas!!!Besos Rafael!!!
ResponderEliminarEs como dices, Eli Méndez.
EliminarUn abrazo.
Bonito poema Rafael, en tu tierra, el verano te debe regalar mariposas, por aquí, solo de vez en cuando aparece aluna visitando las caléndulas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Se ven en casi todas las estaciones, María Rosa, excepto en los meses duros de invierno.
EliminarUn abrazo.