Sigo tus pasos.
Me fijo donde pisas
y me conformo.
Tus huellas claras,
se enmarcan en la arena
inconfundibles.
Así es muy fácil
seguir, aunque las olas
tengan envidia.
Y es que no quieren
que roce tu vestido,
"mi poesía"...
Quieren ser ellas,
las dueñas y señoras
de tu belleza.
Quieren cantarte
baladas de sirenas
y cormoranes.
De aquel naufragio
sufrido por un barco
hace unos años.
De aquel turista
luchando con las aguas
y remolinos.
De los amantes
llegados en la noche
y de sus besos.
Y de aquel Dios,
poeta y trotamundos
que anda perdido.
...Pero no importa.
Yo sigo tras tus pasos
pues soy tu sombra.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/03/23
Me ha parecido precioso. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Inma.
EliminarUn abrazo.
Esa sombra no nos abandona. Muy bello el contenido de estos versos. Feliz día Rafael. Abrazo
ResponderEliminarGracias Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Una composición hermosa. El amor persistente, siempre atento a los pasos, sin abandono, fiel. Me ha gustado mucho, gracias.
ResponderEliminarAbrazo!🌞
Gracias por tu visita y comentario Clarisa.
EliminarAbrazo.
Que bonito poema Rafael, admiro tu arte que diariamente deja tan buena poesía.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias María Rosa, eres muy generosa.
EliminarUn abrazo.
Me encanto tu belleza de poema, gracias amigo.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario.
EliminarAbrazo.
Precioso poema con un final certero. Un abrazo Rafael.
ResponderEliminarGracias Ceciely.
EliminarAbrazo.
Siempre inspirado... te admiro 🎩👏
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