Hasta el roble solitario
han bajado las estrellas,
porque han visto que el silencio
es profundo y tiene penas,
está anclado en las raíces
y desciende bajo tierra,
con las lágrimas bravías
que proceden de galernas,
es un alma atormentada
y es un pecho que se altera,
consecuencias del destino
que así dicta en su libreta,
y por eso, nuestro roble,
está triste y con ojeras,
sin poder prestar consejo
a la bruma y las tinieblas...
En el bosque de la vida
se han perdido los poetas,
persiguiendo inútilmente
a los versos y poemas.
¡Qué locura de su sangre
les recorre por las venas,
al amar un imposible
que les nace en la cabeza!...
Sin embargo, en su locura,
ellos siguen y no cejan,
en la playa de los sueños
dando vida a ese cometa,
y se marchan en sus alas
y recorren muchas leguas,
por parajes infinitos
que alimentan sus quimeras...
"...Hoy el roble no sonríe,
está triste y hasta tiembla,
se lo dice, en el silencio,
a la noche y las estrellas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
08/01/20
los amores imposibles, como algunos robles, perseveran en el tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo
Cierto Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Sin duda alguna ese roble llorará la espera de esos enamorados recostados en él..
ResponderEliminarLos bosques sin duda es la inspiración más natural del poeta ..Un bello poema amigo.
Un abrazo en este viernes.
Gracias por tus palabras Campirela.
EliminarUn abrazo.
Bonito poema Rafael.
ResponderEliminarFeliz fin de semana.
Gracias Laura.
EliminarUn abrazo y feliz finde también para ti.