Besos de fresa
con rimas en desorden,
apasionadas.
Bellas estrofas
que van pidiendo vida
con gran pasión.
Labios preciosos
sedientos de lujuria
y de candor.
Y tras los besos
un rostro enternecido
busca unos ojos.
Versos sublimes
ocultan las pupilas
sin gran misterio.
Hay sencillez,
en letras y palabras
de este susurro.
¡Qué embriagador
el gusto de las fresas
entre tus labios!
Quiero ese néctar,
llevarle a mis sentidos.
¡Cerrar los ojos!
...Y compartir,
las fresas y los besos
en un poema.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/09/20
(Hoy nacen y llevan un toque lujurioso y apasionada, pero sin caer en lo ordinario, quizás porque siempre se ha dicho y escrito mucho, en poesía, acerca de las fresas y ese fruto que tienen con el que la imaginación ha querido desbordar lo infantil y lo bello hacia un mundo de lujuria y pasión sin límites ni fronteras.
Pienso que en el mundo de los niños, sus almas infantiles, no quieren tanto y se conforman con algo más sencillo, pero no por ello, menos bonito y tan sincero como la otra situación.
Soñar con ese momento en que unos labios llevan a otros labios una fresa y la comparten, unir dos manos y cerrar los ojos para hacer de ese acto una especie de comunión de sentimientos y de corazones, sentir el latido, el galope, el gemido hasta romperse y proclamar a los cuatro vientos que se quieren, y, también, lo que sueñan, lo que ansían, lo que desean...)
En los corazones inocentes no hay cabida para las malas intenciones. Tus versos son una dulzura.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Rafael
EliminarUn abrazo.
Todo niño es pura ternura, y solo siente amor profundo por todo, muy bonito poeta.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario.
EliminarAbrazo.
Deberíamos aprender mucho más de los niños a la hora de expresar nuestras emociones, ser más auténticos y dejar de pensar en lo que está bien o mal visto por la sociedad.. Bellos versos Rafael...Bonito dia para ti
ResponderEliminarGracias Eli Méndez.
EliminarUn abrazo.
Una dulzura de poema y que bella la imagen del beso.
ResponderEliminarfeliz finde.
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
labios llenos de infancia, de fuerza dulces haikus preciosos, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea.
EliminarUn abrazo.
Que dulzura tan pura destilan estos versos Rafael. Y es que los niños cuanto más pequeños son, tienen la pureza que describes en tus versos. ¡Qué pena que perdamos esa inocencia al ir haciendonos mayores!
ResponderEliminarUn abrazo con cariño.
Debemos añorarla siempre, Angeles.
EliminarUn abrazo y gracias.
Y de chicle de fresa, y de mirada de fresa, o caramelo.
ResponderEliminarPrecioso post. Un abrazo
Gracias Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Si alguien sabe de amor sincero esos son los más pequeños, tengo la suerte que tener unas gemelas sobrina-nietas de 7 años y cuando me cuentan una de ellas que tiene novio y que se besan en el recreo sus ojos se iluminan ...hay te das cuenta del amor y el sentimiento. Muy bonito gracias Rafel.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz viernes,
Así es la infancia, Campirela.
EliminarUn abrazo y feliz finde.
Fresas que se vuelven lema del amor.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazos.