Regresan las mariposas
y vuelan por los caminos,
ya vienen y van y vuelven,
conmigo y con tus suspiros.
Y aquellas que no regresen
es fácil que se han perdido,
en viajes y por lugares
remotos y con espinos.
Ya van corriendo las nubes
en busca de sus vestidos,
para volver a las fiestas
y las playas, con los niños.
Retornan los corazones
y sueños con mil latidos,
de tiempos y de veranos
vividos, siempre, contigo.
Y aquellos que no retornen
es fácil que estén dormidos,
en lechos y con nostalgias
de cielos, de azul, sencillos.
Es fácil que muchos sueños
estén, por miedo, escondidos
y que vibren las pasiones
en tus labios y en los míos.
Rafael Sánchez Ortega ©
06/07/24
Bonitos versos, las mariposas han disminuido su presencia, las extraño, tal vez en zonas donde el campo se extiende, andan ellas, coquetas, buscando flores.
ResponderEliminarabrazo.
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
El verano, una época especial para que las mariposas revoloteen con los rayos del sol. Un abrazo, feliz tarde.
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo.
Las mariposas, visibles o invisibles... siempre ayudándonos a vivir, con sus mensajes de amor, nostalgia, belleza y libertad. Amo las mariposas... Te mando un abrazo querido amigo.
ResponderEliminarGracias Paty.
EliminarUn abrazo.
Alegría en bandada en tu poema, Rafael...Tus versos vuelan tocándonos a todos con sus alas de mariposa y sus nubes soñadoras...Muy bello y veraníego, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y felices días de julio.
Gracias por tus comentarios de hoy, María Jesús.
EliminarUn abrazo y feliz mes también para ti.
Nunca se pierden. Están como dices en el poema. Laten aunque no nos demos cuenta.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.