miércoles, 2 de mayo de 2012

YO QUERÍA ESCRIBIR PARA TI...


Yo quería escribir para ti esa noche
unos versos sin nombre,
unos versos que fueran sinceros,
sin ajustes y normas y que hablaran de todo.


Lentamente se adormecían tus ojos
y yo te velaba.
Rozaba tu cuerpo mi mano en una caricia profunda
y sin miedo.
Estabas allí, recostada,
tu cabeza apoyada en mis piernas,
mi mano movía tu pelo moreno buscando unos rizos
que nunca existieron y tú suspirabas.


Tenía delante el cuaderno
y algunas palabras llegaron al mismo.
Las letras nacían del alma,
surgían del pecho,
también de mi mano que ardiente sentía tu cuerpo.
Las letras llegaban vibrantes,
quizás machaconas, sin orden ni guía,
rompían el ritmo y la rima del falso poema
que en prosa, salía despacio.


Yo quería plasmar ese instante,
quería romper el silencio del cuarto
y hacerlo llegar al cuaderno,
quería decirte sin más que te amaba,
que estaba contigo y velaba tu sueño,
que había sentido el tic-tac de tu pecho,
monótono y suave, precisando el descanso
y que había salido a mirar en la noche a la luna
y a los álamos tristes del río y también las estrellas
y les dije que sí, que guardaran silencio,
que tú estabas adentro
y que estabas dormida en mis brazos.


Yo quería escribir para ti esa noche
unos versos sin nombre,
unos versos que fueran a ti con mis besos y abrazos
a decirte "te quiero".


Rafael Sánchez Ortega ©
02/05/12

8 comentarios:

  1. Hermosísimo!
    Tantas veces vemos velados nuestros propósitos, por razones que el corazón no entiende,sino que complica.

    Abrazos grandes, Rafael.

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  2. Así somos y así es nuestro corazón Maritza.
    Un abrazo,
    Rafael

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  3. Los versos siempre llegan en un momento inoportuno: o sentimos, o escribimos... Aún así, conseguiste escribir unas palabras magníficas.

    Un abrazo.

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  4. Gracias Laura siempre tan generosa con tu crítica.
    Un abrazo,
    Rafael

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  5. escribe versos, escribe su nombre, escribe en silencio

    un abrazo

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  6. Rafael, los versos sin nombre a fin de cuentas son eso, palabras de sentimientos que se expresan cuando uno realmente quiere de verdad, ¡Qué importa el nombre si el amor es grande! Lo importante es que sean sinceros.
    Todos tenemos siempre algún que otro verso anónimo de esos, en nuestro pensamiento y en nuestra alma que son muy buenos para seguir viviendo.
    Gracias por tu visita poeta. Te envío un saludo Juan.

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  7. Escribo en silencio Arena, no lo dudes.
    Gracias por tu comentario, un abrazo,
    Rafael

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  8. Suscribo tus palabras Juan y agradezco también tu visita.
    Un saludo cordial,
    Rafael

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