Vuelvo a soñar, no puedo remediarlo,
y volveré mi vista a las estrellas,
hasta rozar mis dedos sus pestañas
para secar sus lágrimas sinceras.
No quiero que suspiren los luceros,
ni lloren por la noche las violetas,
ni quiero que se pierdan los suspiros
que emiten en los campos las luciérnagas.
Quisiera ser el mago de los cuentos
que llega con su magia y embelesa,
el héroe venciendo en mil combates
surgiendo de los chistes y novelas.
El niño enamorado de la luna
que cuenta las estrellas mientras cena,
la rueda del triciclo silenciosa
envuelta en el misterio de la niebla.
Quisiera ser la gata entusiasmada
que miaga por la noche tras la puerta,
la rosa perfumada que resiste,
las gotas de rocío que le llegan.
La nota del piano solamente
que nace y desafía la tormenta,
el copo de la nieve que del cielo
nos deja su blancura tan coqueta.
Quisiera ser la letra manuscrita
salida de la mano del poeta,
el sueño de una noche de verano
y el verso que se hace letra a letra.
La voz estremecida del viajero
hablando de sus viajes y leyendas,
el faro y salvación de navegantes
el puerto con su atraque en la ribera.
Quisiera ser... Canción en esta noche,
más cedo mi lugar a este poema,
y quedo con mis sueños en silencio
en medio del sopor que me rodea.
"...Vuelvo a soñar, no puedo remediarlo,
y volaré contigo si me llevas,
hasta el altar sagrado de los dioses
cubierto por la luz de las estrellas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/07/12
Sigue soñando, poeta, que tan nobles intenciones tienen lugar en esta tierra, y en el lugar en que los astros cuelgan su luz en las tinieblas.
ResponderEliminarSigue soñando, poeta.
Un abrazo de sueños en una noche de verano cualquiera.
Gracias Mafalda por tu comentario y esa rima asonante que no has podido ocultar.
ResponderEliminarUn abrazo de sueños, también como tú, en una noche de verano cualquiera.
No lo remedies, Rafael. Seguir soñando es imprescindible.
ResponderEliminar(yo ya me acostumbré a pasarme por tu casa a leer mi poema nocturno)
Gracias por este espacio y feliz noche.
Gracias a ti, María S. por tu paciencia y por esa visita a mis letras.
ResponderEliminarMi puerta siempre estará abierta para que puedas venir cuando quieras.
Un abrazo y feliz noche también para ti.
Hola Rafael, toda una poesía de esperanza esta.
ResponderEliminarMe gustan los trabajos de los poetas que no solamente hablan de penas, sino que acompañan también con su poesía los momentos alegres, o de renacimiento como este.
Un beso enorme.
Gracias Paula, intercambiar penas y esperanzas es como la vida y creo que debemos hacerlo. La sonrisa y el llanto, el blanco y el negro, la cara y la cruz, todo tiene que tener cabida en la poesía. Quizás depende de nosotros, el hacer llegar esos mensajes a los lectores.
ResponderEliminarUn beso también para ti en la noche.
Rafael,estás en ese altar sagrado de los dioses,escribiendo,sintiendo y compartiendo.
ResponderEliminarMi felicitación para ti y para la persona afortunada,que recibe tus poemas...
Mi abrazo grande para los dos,amigo.
M.Jesús
No hay ninguna persona especial a quien vayan dirigidos mis poemas M.Jesús. Simplemente escribo y trato de expresar lo que siento, aunque esa "persona" sea alguien imaginario, un sueño ó una fantasía.
ResponderEliminarMi abrazo para ti en esta noche y no puedo devolverte el de la otra persona, porque no existe.