domingo, 10 de julio de 2022

5.144 - EL NAVEGANTE...



El navegante

quedó muy sorprendido

al ver la playa.


Las olas mansas

rompían en la orilla

con las resacas.


Luego, indolentes,

sus brazos se estiraban

por las arenas.


Unas gaviotas,

sin prisas, contemplaban

aquella escena.


Un cuadro mágico,

se alzaba ante los ojos

del navegante.


Y hasta los cielos,

azules, se asomaban 

para adornarlo.


Nuestro marino

volvía de muy lejos

después de un tiempo.


Días de frío,

de cañas y de pesca

sobre las aguas.


Y en sus pupilas,

brillaban mariposas

de mil colores.


Rafael Sánchez Ortega ©

07/07/22

8 comentarios:

  1. Esas pupilas guardarán un hermoso recuerdo
    Abrazo

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  2. Haber estado lejos, pero regresar con mariposas, es una imagen muy potente.

    Un abrazo

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  3. Si nos fijamos hay que ver la vida de un navegante, solitaria ,pero a la vez llena de recuerdos y personas que habran pasado en su mirada y vida. bueno e lo que me a transmitido tu poema. Un abrazo.

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    1. Gracias Campirela, me alegro de que veas todo eso en mis letras.
      Un abrazo y feliz noche.

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  4. Ese navegante sintió arder su corazón, y su regreso lo embrujo.
    Abrazo

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