Se va el verano
que pasa en un momento
sin darnos cuenta.
Con él se alejan
sonrisas e ilusiones
que nos formamos.
Aquí se quedan
los ojos soñadores
con sus legañas.
Y en ellos, puede,
que siga la inocencia
un rato más.
Y es que no quieren
que acabe este relato
que están viviendo.
Pero la vida
nos llega con etapas,
en estaciones.
Se va el verano
y, pronto, en nuestra puerta,
vendrá el otoño.
Hojas doradas
que alegren las pupilas
de los poetas.
Y es que los niños
afloran, en los versos
y en los poemas.
Se va y se queda,
nos deja mil recuerdos
el fiel verano.
Rafael Sánchez Ortega ©
29/07/22
Cuando se vaya, lo echaremos de menos, ya verás.
ResponderEliminarUn abrazo
Seguro Maripau.
EliminarUn abrazo.
Todavía nos quedan muchos días de verano, y este en particular nos vamos acordar de él por las altisimas temperaturas que algunos hemos padecido y seguimos padeciendo. Todo en esta vida tiene su término medio, en particular prefiero algo mucho más suave. Un beso Rafael y te digo feliz resto de verano ...
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo y que también tengas un feliz mes de agosto.
Vemos pasar el tiempo, todo pasa y se repite, menos la vida. Solo tenemos un verano, un otoño y se acabo.
ResponderEliminarGracias por tu visita y comentario, José Mauricio.
EliminarUn saludo.
Vuelan los veranos y la vida...
ResponderEliminarBellos versos ❤
Así es Galilea.
EliminarUn abrazo.