Lluvia silente
que se llama garúa
en esta tierra.
Es la que ahora
el día nos regala
de madrugada.
Estampa extraña,
de lluvia en las aceras
y en los jardines.
Ya se añoraba
con rezos de los fieles
y rogativas.
Aunque en los ojos
de amantes y poetas
siempre afloraba.
Lluvia de abril,
gotas de primavera,
besos del cielo.
Un bello día,
paréntesis de invierno
y primavera.
Es un aviso,
quizás una respuesta
a las plegarias.
Y a los deseos
de almas y pupilas
enamoradas.
Lluvia silente
que tanto te añoramos,
¡calma mi sed!
Rafael Sánchez Ortega ©
03/05/23
Por aquí ha llovido con fuerza pero dolo dos días, se necesita que llovía mucho más.
ResponderEliminarSí, es un aviso pero que llega tarde. Bellos versos como una súplica, Feliz fin de semana. Abraco Rafael
Sí, aquí también ha sido como dos horas y muy fuerte, pero...
EliminarUn abrazo y feliz finde Carmen.
Es esta noche de viernes también en Bs.As. llueve fina y suavemente. Bello poema.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias María Rosa, me alegro de que coincidamos con la lluvia.
EliminarUn abrazo y feliz finde.
Ese chirimiri o calabobos, cómo nos inspira. Muy bellos versos.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte Rafael
Es una cortina de magia, Maripau.
EliminarUn abrazo inmenso.
Reconforta leer las palabras "lluvia de abril" en este verano anticipado que estamos viviendo.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.
Me alegro Verónica.
EliminarAbrazo.
Esa lluvia tan necesaria que invocan tus versos.
ResponderEliminarBravo 👏🏼👏🏼