Hay rosas blancas,
a un lado del jardín,
que se marchitan.
Da un poco pena
el ver como se apagan
por la otoñada.
Es ley de vida,
te dice un jardinero,
y tú le crees.
De todas formas
hay rosas diferentes,
de otros colores.
Hay rosas rojas,
azules, amarillas,
y también negras.
Sé que me olvido
de algunas, sugerentes,
rosas vibrantes.
Pero la rosa
preciosa, que yo quiero,
está en tus labios.
Allí, suspira,
palpita y me susurra,
siempre tu nombre.
Y no te olvido,
te llevo y vas conmigo,
mi Rosa amada.
Rafael Sánchez Ortega ©
22/04/22
Bellas rosas en tus versos.
ResponderEliminarFeliz día.
Un abrazo
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Esa rosa amada, seguramente, de vez en cuando, modula un querido nombre... y esa vibración recorre el universo para llegar a un jardín aledaño, que siempre volverá a florecer aunque el otoño por un breve tiempo, se lleve sus pétalos al cielo. Nada muere, cuando se lleva en el corazón.
ResponderEliminarHermosos sentimientos amigo. Un fuerte abrazo, Paty
Gracias por tus palabras, Paty.
EliminarUn abrazo y feliz viernes.
Siempre es una entre un millón... Precioso, amigo Rafael.
ResponderEliminarMil besitos en la tarde.
Así es, Auroratris.
EliminarUn abrazo en la tarde y gracias.
Bien refleja la poesía la belleza de las rosas, pero al igual define que entre todas la mejor es aquella rosa que lleva su nombre.
ResponderEliminarUn abrazote.
Gracias por tu comentario, Campirela.
EliminarUn abrazote.
Siempre tus poemas son un canto a l amor estimado Rafael. Las rosas en otoño sufren el cambio, frio y viento, las entristecen, pasa con ellas lo mismo que con las personas, la falta de sol angustìa.
ResponderEliminarmariarosa.
Cierto María Rosa, es como dices.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Unos versos enamorados que unido a ña belleza y coorido de las rosas lo hacen además delicados
ResponderEliminarUn abrazo Rafael
Buen fim de semana
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz finde, también para ti.
Románticos versos llenos de amor.
ResponderEliminarGracias Galilea.
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