Por el nordeste
el alba nos saluda
en la mañana.
Despierta el sol,
el mar recobra el pulso
con las resacas.
Las viejas piedras
de iglesias y castillos
van despertando.
Y tú suspiras,
te estiras en el lecho,
mientras sonríes.
Estás soñando
ajena a la mañana
que se despierta.
Quiero que duermas,
vigilo tu descanso,
no tengas miedo.
Voy a tu lado,
te rozo con mis dedos
y te susurro.
Digo tu nombre,
emites un suspiro
y te sonríes.
Y es que tus labios
el alba los transforma
para los míos.
Rafael Sánchez Ortega ©
01/04/22
El alba también es mágico e inspirador como el mar, logra que viajes a sueños bonitos de amor, precioso amigo, un abrazo desde mii brillo del mar
ResponderEliminarSi, Bea, es como dices.
EliminarUn abrazo.
Te ha inspirado muy bien el alba.
ResponderEliminarDos bocas que se besan en el alba, precioso amanecer.
Feliz fin de semana Rafael.
Un abrazo.
Gracias por tus palabras Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz finde.
Qué bonito..
ResponderEliminarUn abrazo después de tanto sin visitarte.
Gracias por tu visita y comentario María Gladys.
EliminarUn abrazo.
¡¡Que hermoso!!
ResponderEliminarCuanto amor en estos versos, el poeta que vive en tu corazón ha despertado con versos encantadores.
Feliz fin de semana.
mariarosa
Gracias María Rosa.
EliminarTambién para ti un abrazo y el deseo de un buen fin de semana.
Esos amaneceres son bellos sobre todo cuando se realizan en plena naturaleza. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSí, y además inolvidables, Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Nos dejas la luz del alba en tus versos, que nos abraza y nos impulsa a seguir adelante con optimismo, Rafael. Muy hermoso, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz noche.
Gracias María Jesús.
EliminarUn abrazo.
Qué cosa más bonita!
ResponderEliminarFelicidades ❤👏🏼👏🏼👏🏼
Gracias Galilea.
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