El cielo azul
nos manda una sonrisa
en la mañana.
Hay un suspiro
que baja de los cielos
con esa luz.
Hay colorido
con horas del verano
en cuanta atrás.
¡Cuántos recuerdos
nos quedan, de estos días
de vacaciones!
Y de otros años,
vividos y sentidos
intensamente.
El cielo azul
nos dice todo esto
en un susurro.
Y sin palabras,
nos llega su mensaje
junto a la brisa.
El mar, silente,
dormita con las olas
y las resacas.
¡Qué bella imagen,
contigo, en el recuerdo,
"mi mariposa"
Rafael Sánchez Ortega ©
17/09/23
Entre el cielo y la tierra la verdad es propia. Abrazos
ResponderEliminarGracias Ester.
EliminarAbrazos.
El fin del estío tiene su belleza en cada detalle.
ResponderEliminarAbrazo en la distancia.
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
El otoño así como el invierno son maravillosos
ResponderEliminarSaludos 👍
Cierto Elisa, coincido.
EliminarSaludos.
Bonito poema donde ese azul nos invade en el amanecer, es como abrir una ventana a un nuevo mundo , y en realidad asi lo es, cada día es un nuevo comienzo.
ResponderEliminarUn beso, Rafael.
Gracias Campirela.
EliminarUn abrazo y feliz día.
El cielo siempre ahí, dejándonos su mensaje y su grandeza...y el mar también nos deja su misterio e infinitud, Rafael...Muy bello, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo manchego y feliz septiembre.
Basta un cielo despejado, un mar en calma, un momento único, y viene el recuerdo con el poema.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.