Ha llegado la lluvia
y con ella, la niebla,
ha sacado su capa
de ese gris cenicienta.
Primavera que naces
y te muestras inquieta,
con alegres colores
y con verdes praderas.
Festival de sonrisas
y también de promesas,
con suspiros velados
y de tiernos poemas.
Ya se marcha el invierno
con su blanca melena
y sus barbas de nieve
muchos sueños nos dejan.
Volverán los jardines
a cubrirse de perlas
con las flores que nacen
en cuidadas praderas.
Y la sangre del joven
latirá con mas fuerza,
al correr al galope
por su cuerpo en las venas.
Es bonita la infancia
de esta fiel primavera,
que contenta a los jóvenes
y a las almas inquietas.
Y por eso, la vida,
debe ser del poeta,
de los niños que ríen
y del hombre que sueña.
Rafael Sánchez Ortega ©
20/03/24
Un bello homenaje poético a esta primavera recién llegada llena de color, esperanza y alegría.
ResponderEliminarNo dejemos de soñar, cualquier estación es buena para hacerlo.
Ha sido un placer detenerme en tu espacio y leerte.
Cariños y buen fin de semana.
Kasioles
Gracias por tu visita y comentario, Kasioles.
EliminarUn abrazo.
Y por eso la poesía está en tus sentimientos convertidos en bellos versos.
ResponderEliminarPor aquí no ha llegado, espero que se cumpla lo de "abril lluvias mil"
Un abrazo poeta Rafael.
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo.
¡¡Que lindo poema!!
ResponderEliminarAsí es, la primavera recien comienza y vive su infancia en el verde y en la lluvia.
Un abrazo.
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Lindo poema donde la primavera nos deja esa estela de niñez e infancia. Un besote Rafael.
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo.
Lindísimo poema, un canto a la primavera que renacer en nosotros cada año, puntual a la cita con la claridad y los colores que adornan la Tierra. Y el alma.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Rafael.
Gracias Maripau.
EliminarUn abrazo.
Y tú, con tu poema haces una preciosa fotografía de la primavera, me ha gustado mucho Rafael
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo.