Que no te aburra
la lluvia de este día.
Vive sus horas.
Deja que el agua
se escurra en los tejados
y alcantarillas.
Que vaya al mar,
se mezcle con las olas
y las resacas.
Que no te canse
el triste colorido
de la mañana.
Y que ese gris
no cierre tus pupilas
y las anime.
Porque la lluvia
anima la nostalgia
y los recuerdos.
Que no se diga
que el agua de la lluvia
te da jaqueca.
Ni que la bruma
que vierten hoy las nubes
hiere tu cara.
Deja, en tus labios,
el beso y la sonrisa
que tanto ansío.
Rafael Sánchez Ortega ©
06/12/21
Diría más bien que la lluvia me gusta verla y escucharla y hay que reconocer que es muy necesaria, que llueva y limpie el aire que falta nos hace.
ResponderEliminarUn feliz día en este caso ocaso.
Cierto y tiene sus momentos bonitos y acogedores, Campirela.
EliminarUn abrazo en la tarde.