Fue tu sonrisa
la llama de esperanza
que precisaba.
Llegó a mi lado,
vibrando de tus labios
y me embriagó.
Con tu paciencia
calmaste mis sentidos
y los dormiste.
¡Qué dulce paz
recuerdo que inundó
mi corazón!
Hoy la sonrisa,
la veo y titubea,
ya no es la misma.
Todos cambiamos,
lo sé, somos conscientes,
pero seguimos.
La senda avanza,
nosotros lo intentamos,
titubeando.
Y rebuscamos.
Yo busco tu sonrisa,
como hace tiempo.
Y si, en tus labios,
la noto, yo sonrío
y soy feliz.
Rafael Sánchez Ortega ©
03/05/22
Buscar y encontrarnos con una sonrisa es lo más. Bonitos versos. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Carmen.
EliminarUn abrazo.
La vida siempre nos dará esa sonrisa de ayer, hermoso.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario.
EliminarUn abrazo.
Esa sonrisas que mueven el mundo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es Maripau.
EliminarUn abrazo.
No te canses de buscar esa sonrisa que te enamoró, seguro que está ahí
ResponderEliminarUn abrazo
Seguiremos buscando esa utopía, Carmen.
EliminarUn abrazo.
Hay sonrisas inolvidables, dan calor a pesar de la distancia y el tiempo. Muy bonito poema.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias por tus palabras, María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Como dice la canción que no sé da por una sonrisa del enamorada/o, ella es la mejor medicina para el mal de amores y cualquier otro mal.
ResponderEliminarUna feliz noche. Abrazos!!
Que nunca se pierda la sonrisa, Campirela, esa debe de ser nuestra meta.ç
EliminarUn abrazo en la noche.
Una sonrisa genuina habla por mil palabras y sana más que muchas frases. A veces nos podemos enamorar como un rayo... de una dulce mirada junto a una encantadora sonrisa.
ResponderEliminarTe mando un gran abrazo amigo. Que descanses bien y mañana sea un lindo día. Paty
Gracias por tus palabras siempre tan sinceras, Paty.
EliminarUn abrazo y feliz día.