Deja que apoye
mi frente en tu regazo
y que descanse.
Limpia mis lágrimas,
perdona mis pecados,
dame tu paz.
Es la plegaria
que escapa de unos labios
que te aman tanto.
Y que te llaman,
te buscan en las sombras
y en la distancia.
Quieren la esencia
que dejan tus palabras
y tus caricias.
También precisan
el labio que les deje
candor y amor.
Deja que sueñe,
que forje fantasías,
junto a tu cuerpo.
Seré ese niño
con ojos soñolientos
que se ha perdido.
Y dormiré,
contigo, si tú quieres,
mientras te abrazo.
Rafael Sánchez Ortega ©
01/05/22
Llego tarde, pero mereció la pena entrar y leer tu poema .Feliz noche, abrazos
ResponderEliminarGracias sinceras Campirela.
EliminarUn abrazo y feliz comienzo de semana.
Esos labios, dejando en paz quien se acomoda allí.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Maripau.
EliminarUn abrazo.
Que ese dormir sea un sueño de gozo. Feliz mes de mayo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz mes de mayo, también para ti.