Vago por el parque
con mis pensamientos,
que se vuelven locos
y que están inquietos,
todo por noticias
que vienen de lejos,
de tierras extrañas
y de hombres enfermos,
empieza una guerra
con sangre y con fuego,
hay seres que corren
cargados de miedo,
hay madres que sufren
con niños por medio,
al ver a sus hombres
rumiar el silencio.
Me pierdo en las horas
y el paso del tiempo,
no sé lo que ocurre,
me falta el aliento,
ahogué los sentidos,
cerré los recuerdos,
el alma me sangra
y el pozo es muy negro,
¡malditas las guerras
y el mundo de ciegos
que mira al ombligo,
no al ojo del cuerdo!
¡Benditos los niños
de rostros inquietos,
no tienen la culpa,
la guerra no es de ellos!
Suspiro y me callo,
no quiero estos versos,
amar es sencillo
y todos tenemos
la suerte y fortuna
de hacerlo en el tiempo.
"Amar al hermano,
nos dijo el Maestro"
Rafael Sánchez Ortega ©
02/03/22
Precioso canto. NO hay consuelo para el dolor de ver las barbaries.
ResponderEliminarUn abrazo, Rafael
Cierto Maripau.
EliminarUn abrazo y feliz tarde.
Los pensamientos ahí van siempre con nosotros.
ResponderEliminarFeliz día Rafael.
Tienes razón, Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Hola amigo, qué bella y sensible poesía! Hermosa por su construcción pero triste por el sentido de su contenido. Qué desconsuelo más enorme la guerra, y esos inocentes niños que nada entienden del odio, del hambre de poder, de la muerte. Y pareciera que todo el dolor, toda la destrucción y todas las víctimas directas o indirectas de tales aberraciones en nada conmueven a sus gestores. Cuan ciega puede estar un alma para no distinguir entre el bien y el mal, para nunca reflexionar, para jamás compadecerse, para ni pensar en parar!. Ya ni veo noticias, me produce mucha amargura e impotencia, pero rezo por la oscuridad del mundo, por las almas inocentes y también por una transformación de las almas enceguecidas.
ResponderEliminarEsperemos termine y pronto, que se conjugue una fórmula pacífica de cese. Te mando un fuerte abrazo amigo. Paty
Gracias por tus palabras y comentario que comparto, Paty.
ResponderEliminarUn abrazo y que tengas un feliz día, querida amiga.
Hoy nos dejas en forma de poema aquello que todos pensamos pero a veces no llegamos a verbalizar y tú lo has dejado, pero que muy bien expresado. Muchas gracias Rafael.
ResponderEliminarTe mando un abrazo y felices sueños.
Gracias por tus palabras, siempre tan amables, Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Suscribo tus pensamientos, Rafael. Todos estamos tristes y apesadumbrados, vemos sufrir a tantos seres humanos, emigrar, huir, alejarse de la guerra, que implacable avanza...Quiera Dios que acabe pronto y volvamos a la normalidad, ojlá sea así, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y gracias por tus letras.
Ojalá sea como tu dices, María Jesús.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Aplaudo el poema, Rafael. Gracias por cada verso.
ResponderEliminarLa guerra no es para nadie, pero los niños... Ninguno debería ver la muerte tan pronto ni tan cerca.
Quien mata a un niño no merece vivir. Punto.
Abrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazo.