Avanza el tren
en medio de los campos
con nuestras vidas.
Va, con su carga,
cansado y abrumado.
No se detiene
Lleva los sueños
y algunas utopías
que le entregamos.
El viejo tren
sin camas y literas
que bien conozco.
Es una pieza
de máquina y vagones
con mis latidos.
Es perezosa
su marcha y traqueteo,
pero no importa.
Este es mi tren,
igual que el de vosotros
seres con sueños.
Y es que las almas
precisan que las canten
y las acunen.
Por eso el tren
se asocia con la luna
para este viaje.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/03/22
Avanza el tren avanza el tiempo arrasando todo...
ResponderEliminarYa estoy de regreso.
Feliz semana Rafael.
Abrazo
Gracias Carmen, y bienvenida.
EliminarUn abrazo.
El tren suele ser nuestra vida, estaciones que guardan nuestros recuerdos.... el tren sigue hasta llegar a la ùltima estaciòn...
ResponderEliminarAplausos Rafael.
Un abrazo.
Y nosotros debemos vivir intensamente ese viaje María Rosa.
EliminarUn abrazo y gracias.
Que lleve esperanzas y sonrisas, donde sea, pero dando vida. Acabo de ver un tren por Reus, cargado con tanques, lo creas o no.
ResponderEliminarUn abrazo
Pues eso me pone triste, Maripau, aunque no lo creas.
EliminarUn abrazo y gracias.
El tren y todas las estaciones bien puede representar a la vida del ser humano cada estación es una etapa y en cada una de ellas hay algo lindo para poder disfrutar. Un abrazo feliz noche.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Los trenes dicen que hay que cogerlos o se pierden
ResponderEliminara veces te salvas si lo pierdes, otras no...
cosas mías
es un poema precioso Rafael, con tu sensibilidad
Un abrazo grande
Gracias por fijarte en estas letras, Cora.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Cada uno tenemos nuestro tren, cierto.
ResponderEliminarMe gusta este al que poetizas, con la luna acompañando. Su luz de plata siempre trae sosiego.
Abrazo, Rafael.
Me alegro de que te guste este tre, Verónica.
EliminarAbrazo.
El tren es una buena metáfora del tiempo de la vida, que a veces va despacio y otras corre veloz. Ahí estamos todos, mirando por la ventanilla, mirando y sintiendo la vida. A veces cambiamos de tren y de estación, pero siempre lo retomamos, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo y buen viaje en ese tren del día a día, Rafael.
Gracias por tu comentario, María Jesús.
EliminarUn abrazo.
El tren de nuestra vida... sigue su curso. Hagamos bello el trayecto. Tus versos lo consiguen.
ResponderEliminarAgradecido Galilea.
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