Hoy sopla el viento
y mueve las cortinas
de las ventanas.
En los balcones
dormitan los geranios
en la mañana.
Las golondrinas
acuden al alero
de los tejados.
Se fue el verano
dejando sus recuerdos
entre nosotros.
Días de luz
con sol y con calor
sin darnos tregua.
Y el mar tranquilo,
rebelde, con sus olas,
verdeazuladas.
Esas resacas,
perduran en la mente
y el corazón.
Días y horas
vividas y seguidas,
intensamente.
Por eso, el viento,
las mueve, cual banderas,
bajo tu pelo.
Y es que tus ojos
ansían la añoranza
de esas jornadas.
Rafael Sánchez Ortega ©
07/10/22
Te leo y diviso ese viento y el olor de los geranios. Una feliz sobremesa ..Abrazos.
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
El poema transmite paz.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazo.