Hoy, los silencios
son pétalos cortados
de algún otoño.
Vida que pasa,
veranos que marchitan
en el recuerdo.
Profundas notas
de hermosas primavera
ya en el olvido.
Y mientras tanto
prosiguen los silencios
y los suspiros.
Es como bruma
que aleja los sentidos
de la vivencia.
Pero se notan
las rosas desgajadas
de algún jardín.
Y es que el silencio
también afecta al alma
en su poema.
Esos latidos
que mezcla con caricias
entre sus letras.
Y esos dictados
que el mundo le interrumpe
con sus silencios.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/06/21
Los silencios tienen dos efectos en nuestra vida... uno de gran inquietud y otro de paz e introspección. Me quedo con este último, porque el silencio está presente en todo, es como el aire que respiramos. Necesitamos silencio y calma para conocernos en profundidad y también para pensar y actuar con sabiduría.
ResponderEliminarLindo tema amigo. Un fuerte abrazo, Paty
Gracias por tus palabras y comentario, Paty.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Los silencios, qué poder tienen. Conozco a una poeta que los utiliza mucho y en sus talleres, oírla hablar es fascinante. Se gana a la audiencia no solo por lo que dice...sino también por sus silencios.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Noelia.
EliminarUn abrazo.
En el silencio es que uno se encuentra con uno mismo.
ResponderEliminarMe gusta tener momentos de silencio.
Besazo y feliz descanso.
Hay veces en que el silencio es necesario, Paula.
EliminarBesos.
Me ha encantado tu poema, amigo Rafael... y es que los silencios tiene tantas interpretaciones... óleos del tiempo o de la voz. Precioso.
ResponderEliminarMil besitos en la tarde.
Gracias Auroratris.
EliminarUn abrazo.
Cuantas veces un silencio dicen más que mil palabras. Buenas noches y felices sueños.
ResponderEliminarCierto Campirela.
EliminarUn abrazo.
Y es que el silencio
ResponderEliminartambién afecta al alma
en su poema.
Y tanto...
Abrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazo.
Mezclar caricias con las letras, ese es un buen latido.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Laura.
EliminarBesos.