martes, 19 de octubre de 2021

4.729 - TEMBLABA...



Temblaba el ciervo,

herido en la pradera,

por un disparo.


Me sorprendió

los ojos que pedían

una caricia.


No había sido

mi mano la causante

de esta desgracia.


Temblaba el mar

por culpa de los vientos

y la galerna.


Y ese temblor

cundía entre los barcos

a la deriva.


Eran juguetes

en manos del destino

y de los cielos.


Temblaba el junco

que estaba en la ribera

oyendo al río.


Tristes canciones

mandaban los meandros

hasta la orilla.


Y el alma, alegre,

del niño que soñaba

se estremecía.


Rafael Sánchez Ortega ©

27/06/21

14 comentarios:

  1. Es triste pero es la vida misma, corazones rotos que subsisten.
    SAludos.

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  2. A veces la vida nos manda mensajes de diferentes formas y una de ellas son esos temblores de los que hablas, el miedo a no pertenecer a algo a alguien. Un beso Rafael.

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    1. Cierto Campirela, pero hay que intentar superar esos "temblores"
      Un beso.

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  3. uuufff "temblaba el mar", puede ser los vientos, pero también puede ser la esencia del amor, preciosos haikus un abrazo desde mi brillo del mar

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  4. Qué bonito, Rafael! Crea una atmósfera expectante como justo antes de que ocurra una tragedia, ese paisaje que casi la anuncia.
    Me ha gustado mucho conocer tu blog, me quedo a seguirte. Espero que estés a gusto en mi rincón.
    Un abrazo.

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    1. Gracias por tu visita y comentario Noelia. Visitaré tu espacio.
      Un abrazo.

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  5. Hay destinos que no sabemso cómo evitar.

    Un abrazo, y por bonito día

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  6. A cada uno nos toca una vida, la del ciervo fue corta, la del mar es eterna. Un abrazo.

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  7. Tantos temblores como sensibilidades.

    Abrazo, Rafael.

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