El miedo es libre
y llega y nos abraza
sin preguntar.
Nos intimida
quizás, desde el silencio,
y sin palabras.
Es un susurro
que viene hasta nosotros
y atasca el alma.
El miedo es duro,
penetra en nuestra sangre
y la congela.
Arden las venas
sufriendo en la batalla
del cuerpo y mente.
A veces mengua
su acoso, cual galerna,
enfebrecida.
El miedo es miedo
y sobran las palabras
ante su estampa.
Porque los hombres
crecemos temerosos
y somos débiles.
De todas formas
la vida nos enseña
a superarlo.
Rafael Sánchez Ortega ©
15/08/21
Bien cierto es lo que dices, que el miedo es libre. El miedo nos bloquea.
ResponderEliminarQue tengas una feliz semana.
Un abrazo.
Sí, María, así es.
EliminarUn abrazo y feliz semana.
Hay que vencer los miedos, como sea.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Laura.
EliminarBesos.
Al miedo se le vence con enfrentarse a él, aunque no sepamos como nos va responder , siempre podremos decir que lo hemos intentando y le hemos ganado. Un abrazo Rafael.
ResponderEliminarNo siempre lo superamos...
ResponderEliminarMuy buen poema.
Mariarosa
Cierto, María Rosa.
EliminarUn abrazo y gracias.
Esperanzador Rafael, gracias por tan lindo Poema. Un gran abrazo.
ResponderEliminarGracias Anton.
EliminarUn abrazo.