La soledad
se lucha y se pelea
con uno mismo.
Es fastidiosa,
resulta mal amiga,
y hasta traidora.
Es, su silencio,
un nido de reproches
y de recuerdos.
Por eso mismo
luchamos contra ella
con nuestras fuerzas.
Pero la vida
nos deja, muchas veces,
con su presencia.
Es la, invisible,
inmensa pesadez
del solitario.
Él, con su alma,
suspira en la distancia
mirando al cielo.
Busca en la vida
el ritmo y el latido
del día a día.
Por eso mismo
le arranca a los sonidos
"su soledad"
Rafael Sánchez Ortega ©
27/08/21
La soledad puede ser una mala consejera y otras veces una buen amistad, todo depende de la actitud que tengamos ante ella. Un poema donde deja claro que en esta ocasión la soledad no es buen compañía. Abrazos y feliz comienzo de semana.
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo y también, para ti, una feliz semana.
Hola Rafael, lindo tema es la soledad, aunque a veces nos pone tristes, en otras resulta una musa inspiradora.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias por tus palabras, María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Arranca muchos saoidos, casi siempre internos, que son los que valen.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Maripau.
EliminarUn abrazo.
La soledad nos prueba la fortaleza, la paciencia y el temple del espíritu, Rafael. Buen poema para reflexionar y conocernos a fondo, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz semana,Rafael.
Gracias por tus palabras, María Jesús.
EliminarUn abrazo y feliz semana también para ti.
y a veces es inevitable vivirla, profundos versos amigo, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea.
EliminarUn abrazo.